MARIO VARGAS LLOSA

 Considerado uno de los más importantes novelistas latinoamericanos, su obra ha cosechado numerosos premios, entre los que destacan el Rómulo Gallegos, en 1967, el Príncipe de Asturias de las Letras,  en 1986, el  Premio Planeta en 1993, el Miguel de Cervantes en 1994 y el Nobel de Literatura en el 2010.

Urania. No le habían hecho un favor sus padres; su nombre daba la idea de un planeta, de un mineral, de todo, salvo de la mujer espigada y de rasgos finos, tez bruñida y grandes ojos oscuros, algo tristes, que le devolvía el espejo. ¡Urania! Vaya ocurrencia. Felizmente ya nadie la llamaba así, sino Uri, Miss Cabral, Mrs. Cabral o Doctor Cabral. Que ella recordara, desde que salió de Santo Domingo («Mejor dicho, de Ciudad Trujillo», cuando partió aún no habían devuelto su nombre a la ciudad capital), ni en Adrian, ni en Boston, ni en Washington D.C., ni en New York, nadie había vuelto a llamarla Urania, como antes en su casa y en el Colegio Santo Domingo, donde las sisters y sus compañeras pronunciaban correctísimamente el disparatado nombre que le infligieron al nacer. ¿Se le ocurriría a él, a ella? Tarde para averiguarlo, muchacha; tu madre estaba en el cielo y tu padre muerto en vida. Nunca lo sabrás. ¡Urania! Tan absurdo como afrentar a la antigua Santo Domingo de Guzmán llamándola Ciudad Trujillo. ¿Sería también su padre el de la idea?

lafiesta

Fragmento tomado de La fiesta del chivo, novela publicada en el 2000, que se centra en el asesinato del dictador Rafael Trujillo y los hechos posteriores a este, una novela sobre la dictadura.

Lucía Babelio, junio 2019.

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